CONAN: LOS PIRATAS

Saludos, manchadores de miniaturas, tiradados, juntaletras, frikis varios y demás gente de mal vivir.

Aquí estamos de nuevo, espaciadas mis visitas en el tiempo, ya que la época estival no anima precisamente para estar encerrado debajo de un flexo restregando pintura con un pincel minúsculo.

Pero bueno, poco a poco algo sale y hoy os presento a los piratas del juego de tablero de Conan, publicado por Monolith.

Vamos a verlos un poco más de cerca... tras el salto.

Primero de todo, recordarte que puedes ver las fotos más grandes pinchando sobre ellas.

El juego de Conan lo vimos hace ya algún tiempo Aquí. También hice un artículo jugando el primer escenario del libro, con todas las miniaturas del escenario pintadas. Aquí.

El caso es que, con todos los extras que se desbloquearon, el juego de Conan trae algo así, sin exagerar, como un millón de miniaturas. No tengo ni prisa ni plazos, pero siempre hay alguna unidad de Conan en mi mesa de pintura. Voy haciéndoles cosillas, conforme tengo tiempo y ganas. Que si hoy las imprimamos, un mes después les pinto la piel. Ahí están otro par de meses cogiendo polvo, luego les doy un lavado de tinta... 

Así que esta semana, con todas las pieles hechas, me lié la manta a la cabeza, cogí los botes de pintura de colores vivos y chillones, muy del gusto de esta gente del mar, y empecé a pintar las prendas de ropa de colores aleatorios.

 Los que veis son los quince piratas que vienen con el juego base. Pero como dije, se desbloquearon muchos extras, un cajote entero del mismo tamaño que el juego original, lleno de plástico y cartón. Entre las miniaturas desbloqueadas, otros cinco piratas adicionales en pose alternativa.

Los he pintado siguiendo mi método habitual con miniaturas humanas. Imprimación blanca. Luego pinto la piel de color carne. Para representar la mezcolanza de razas que se juntan en estos grupos de delincuentes marítimos, he usado tres tonos: carne enana para los hombres de raza blanca (aunque están todos morenetes de estar en el mar), carne bronceada, que queda un tono más amarillo-anaranjado, para representar a los orientales, y marrón quemado para los compañeros de raza negra.

Luego un lavado de tinta Reikland Fleshshade, para dar las sombras a la carne y perfilar el resto de la miniatura, dándole contraste y que se diferencien las zonas a pintar mejor... bueno, y para que si se queda alguna rendija sin pintar no se vea blanco chillón... Obiamente, a los compañeros de raza negra, el lavado no les hizo nada a la piel, oscura ya de por sí, o sea que con ellos opté por iluminar las zonas más prominentes con un marrón más claro.

Luego, como dije antes, colores aleatorios en las diferentes prendas de ropa... así, a lo loco.

Algún lavado para sombrear las prendas de ropa, no todas, casi también al azar.

Detalles en metal dorado en el cuerpo y en las armas, y plateado en el filo de espadas y hachas. La base de marrón quemado, como estoy pintando todas las peanas del juego. Capa de barniz para que aguanten tralla, que al fin y al cabo son para jugar y manosearlas.

Y a la caja de luz, a hacer unas foticos.

Aquí os pongo una de cada en detalle, por delante y por detrás.

 

 

Ni que decir que los piratas, casualmente, forman parte del segundo escenario del libro. En cuanto tenga pintadas el resto de miniaturas que salen en el escenario, lo volveremos a jugar con un bonito reportaje para vosotros.

Al ritmo que llevo de pintado, calculo que para el 2023. A no ser que haya otra pandemia, con confinamiento, igual pinto más y se adelanta... 

Nada, querido lector, no seas pirata malo y cuídate, que tengo pocos lectores.

Un saludo, nos vemos.